4 de octubre de 2021
El Fondo Monetario Internacional (FMI) se ha convertido en el último gran organismo mundial en intervenir con un llamamiento a los gobiernos del mundo para que luchen contra la adopción de las criptomonedas, o sufran las consecuencias.
SOL recibe más inversiones que ETH, criptoempleos en auge y + noticias
En su nuevo Informe de Estabilidad Financiera Global, el FMI aborda los “retos de estabilidad financiera” del “ecosistema de las criptomonedas” en un capítulo específico, y sugiere a los líderes económicos que luchen contra las criptomonedas, emitiendo sus propias monedas digitales del banco central (CBDC).
Para descargar el informe, click aquí.
En una entrada de blog adjunta, el FMI admitió que las criptomonedas ofrecen “pagos rápidos y fáciles”, así como “servicios financieros innovadores” y “acceso inclusivo a partes del mundo anteriormente no bancarizadas”.
Escribió que el “cripto ecosistema también está floreciendo, repleto de intercambios, carteras, mineros y emisores de stablecoin”.
Pero también advirtió que el cripto está plagado de “riesgos para la protección del consumidor que siguen siendo sustanciales, dada la limitada o inadecuada divulgación y supervisión”, señalando que algunas monedas fueron “probablemente creadas únicamente con fines especulativos o incluso con fines de fraude”.
Los #criptoactivos plantean nuevos desafíos para la estabilidad financiera. ¿Qué es lo que más les preocupa? #GFSR— FMI (@FMInoticias) October 2, 2021
El FMI afirmaba que la “criptoanización” era un riesgo en las “economías emergentes”, donde la “adopción de las criptomonedas” ha “superado a la de las economías avanzadas”, debido a factores como la “escasa credibilidad de los bancos centrales y la vulnerabilidad del sistema bancario”, así como a las inadecuadas redes de pago.
Esta criptografía, añaden los autores, “puede reducir la capacidad de los bancos centrales para aplicar eficazmente la política monetaria” y provocar “riesgos de estabilidad financiera” a través de “riesgos de financiación y solvencia derivados de los desajustes monetarios”. También podría causar daños a los consumidores y comprometer la integridad financiera, señalaron.
¿La solución, según el FMI? Más regulación, más vigilancia y más CBDC.
Los autores del informe escribieron:
“Los responsables de la formulación de políticas deberían aplicar normas mundiales para los criptoactivos y mejorar su capacidad para supervisar el ecosistema de las criptomonedas abordando las lagunas de datos”. Los mercados emergentes que se enfrentan a los riesgos de la criptografía deberían reforzar las políticas macroeconómicas y considerar los beneficios de la emisión de monedas digitales del banco central.”
A escala mundial, el FMI afirmó que “los responsables de las políticas deberían dar prioridad a hacer que los pagos transfronterizos sean más rápidos, baratos, transparentes e inclusivos”, utilizando los planes elaborados por el G20.
También pidió a los reguladores nacionales que “den prioridad a la aplicación de las normas mundiales existentes” y refuercen los protocolos de valores, pagos, compensación y liquidación aplicables.
Los emisores de stablecoins recibieron otra advertencia sobre la posible tormenta regulatoria que se avecina, ya que los autores concluyeron que “a medida que crece el papel de las stablecoins”, las regulaciones “deben ser proporcionales a los riesgos que plantean y a las funciones económicas que cumplen”. Las normas “deberían alinearse”, sugirió el organismo, con “las entidades que ofrecen productos similares”, como “los depósitos bancarios o los fondos del mercado monetario”.